Tipos de papel para empapelar paredes

Escoger la estética de las paredes de casa es uno de los apartados más importantes de la decoración de interiores, pero también puede resultarnos todo un desafío. Aunque la opción más habitual suele ser la pintura de interiores, lo cierto es que los papeles de pared cada vez se vuelven más habituales, puesto que nos ofrecen numerosas ventajas frente a la pintura.

Si te estás planteando utilizar papel de pared para empapelar las paredes de casa, a continuación queremos hablarte de los tipos de papel de pared que existen, de sus características, diferencias y ventajas frente a la pintura. Con esto serás capaz de escoger aquel que mejor se adapte a cada estancia en función de sus características y de tus necesidades.

Tipos de papel de pared

A la hora de escoger un papel de pared vamos a tener que fijarnos, sobre todo, en los materiales, en los acabados y en las texturas que estos utilizan, ya que esto determinará no solo la estética, sino también la funcionalidad de este papel. Para ello, vamos a nombrar todos los tipos de papel de pared que existen, explicando sus características principales con la finalidad de que puedas hacerte una idea de qué los diferencia y qué los hace destacar:

Papel pintable

Este tipo de papel de pared suele ser completamente blanco y utiliza distintos patrones geométricos que cuentan con un ligero relieve. Su uso principal es que funciona para que pueda ser pintado con pintura de interior, de modo que podemos personalizarlo a nuestro gusto.

Papel pintado tradicional

Este suele ser el modelo más extendido y suele ser aquel que se pega sobre las paredes y que se imprime con diseños de todo tipo. La superficie es lisa, no cuenta con relieves y, además, es uno de los papeles más baratos y, por lo tanto, menos resistentes, por lo que no permite mojarse ni tampoco lavarse.

Papel vinílico

Hablamos de un papel formado por varias capas y que cuenta con una exterior de vinilo que ayuda a generar texturas y relieve que no vamos a poder conseguir en un papel normal. Este tipo de papel vinílico suele ser el más adecuado para evitar el desgaste y, además, es uno de los más resistentes a los roces y rayaduras.

Revestimiento vinílico

En muchas ocasiones, puede confundirse esta opción con la anterior, pero cada una de ellas cuenta con sus características. En este caso, no hablamos de un papel por capas, sino de un revestimiento compuesto por una única capa que cuenta con fibras vinílicas, por lo que no hablamos realmente de un papel, aunque puede funcionar como tal. Esta opción es una de las más caras precisamente porque es el papel que cuenta con mayor resistencia al lavado y al roce, de modo que resiste mejor a la humedad.

Revestimiento de fibras naturales

Hablamos de otro papel con capas, en este caso la interna de papel y la externa que utiliza fibras naturales, como pueden ser, por ejemplo, la madera, el corcho, el yute, el lino o el bambú. Destaca en especial por su relieve y por la irregularidad que presenta en las formas y colores. Esto lo hace único, puesto que cada pieza contará con unos patrones diferentes.

Revestimiento de imitación de tela

De una forma similar al caso anterior, con este revestimiento podemos encontrar un acabado sintético que intenta imitar el terciopelo o diversas otras telas. En estos casos, hablamos de tejidos o bien lisos o geométricos o florales que tratan de buscar una estética clásica y antigua. Precisamente por este tipo de imitación, el papel suele ser más delicado, así que suele utilizarse o bien en zonas muy cuidadas o también a modo de acento decorativo en lugares concretos de las estancias. Por ejemplo, también pueden utilizarse para crear diferentes cenefas decorativas.

Papel no tejido

Este otro tipo de papel de pared también utiliza dos capas, la interna de papel y la externa formada por varias fibras sintéticas y vinílicas que tratan de emular un tejido. También se lo conoce con el nombre de papel de TNT.

Papeles impresos a medida

Como puedes imaginar, también encontramos la opción de imprimir nuestros propios fotomurales y convertirlos en paredes. Esta es una opción cada vez más habitual, sobre todo para las personas que quieren crear estancias completamente personalizadas. Es un tipo de papel pintado que utiliza prácticamente el papel del papel pintado tradicional o en tejido TNT. Existen fotomurales con fotografías reales o murales impresos que utilizan dibujos, patrones e imitaciones de tejidos. Como su propio nombre indica, estos se hacen a medida para las paredes, de modo que cuentan con dimensiones específicas para cada caso.

¿Qué papel de pared es mejor para cada estancia?

Tras conocer los distintos tipos de papel pintado que existen para las paredes, puede surgirnos la pregunta de cuál de ellos resulta más adecuado para según qué estancia. Ya hemos visto que cada uno de estos tipos de papeles cuenta con sus propias características y, por ello, algunas de estas van a resultar más adecuadas, por ejemplo, para zonas donde haya mayor ventilación, para ambientes más húmedos o para lugares donde directamente la luz del sol.

Todos estos factores afectarán de forma directa o indirecta a la calidad del papel pintado. Es por este motivo que, a la hora de escoger el mejor papel pintado de pared, tenemos que considerar también estas características para asegurarnos de que empapelamos las paredes de la forma más adecuada. Te recomendamos que tengas esto en cuenta a la hora de comprar papel pintado online, y que te fijes en todo momento en las características y especificaciones de cada papel. Dicho esto, te dejamos a continuación los tipos de papel pintado que se recomienda utilizar para cada habitación:

  • Para los dormitorios o para las habitaciones que funcionan a modo de despacho o estudio o biblioteca podemos utilizar todo tipo de papeles, ya que van a ser estancias donde, de forma general, no vamos a tener humedad y donde no hace falta una resistencia concreta.
  • Si hablamos de las cocinas y los baños, en este caso sabemos que vamos a necesitar papeles de pared resistentes a las manchas, por ejemplo, de aceite o a las salpicaduras de la comida o de los productos químicos. Por este motivo, trataremos de utilizar siempre papeles que sean lavables y también resistentes a la humedad. Hay que tener en consideración que los papeles vinílicos van a ser generalmente la opción más adecuada para las cocinas y los baños, pero tenemos que tratar de evitar que estos entren en contacto directo con el agua o con zonas cercanas al fuego.
  • Para los salones, los comedores, los pasillos o los recibidores podemos utilizar papeles que sean más resistentes. Al hablar de estancias donde suele haber más bullicio y en las que pasamos más tiempo, pueden surgir más roces. El movimiento de los muebles o los cambios de decoración pueden afectar a la pared, así que el papel de pared vinílico o un papel TNT será resistente y, además, permitirá una mayor limpieza.
  • Por último, si hablamos de habitaciones de bebés, infantiles o de adolescentes, lo mejor es utilizar papeles vinílicos económicos que no cuenten con PVC. En estos casos buscaremos papeles de pared pintados que utilicen la menor cantidad de componentes químicos y que no tengan ningún componente nocivo a modo de asegurarnos de que sobre todo los niños más pequeños que entren en contacto con estos papeles no puedan intoxicarse. Asimismo, la superficie plástica en estos papeles será la más adecuada para asegurar un lavado y una higiene en el caso de que las paredes sufran rayones o manchas.

Por qué usar papel pintado para pared: ventajas

Ahora que ya conocemos los distintos tipos de papel de pared pintado que podemos encontrar en el mercado y hemos determinado cuál de ellos es mejor para cada habitación, lo siguiente será que destaquemos las características del papel pintado. Con ello, conoceremos las ventajas de utilizarlo frente a la pintura convencional, ya que podemos tener en consideración que muchos de estos no solo nos ayudarán en el ámbito estético, sino también en el de la higiene, la limpieza y la funcionalidad.

  •  Una de las principales ventajas del papel pintado frente a la pintura es que muchos de los que hemos mencionado previamente son lavables o constan de una gran resistencia al agua o a la humedad. Cuando la pintura de pared se moja, esta puede crear manchones que estropean la pared y perjudican la estética.
  • Otra ventaja del papel pintado es que este protege a la pared de los roces y de los rayones que puedan ocasionarse con el día a día.
  • El papel pintado, además, no solo puede aplicarse a las paredes, sino que también podemos utilizarlo en el mobiliario. Esto nos ofrece un sinfín de posibilidades, ya que podemos amueblar una estancia completa utilizando diferentes papeles pintados que se combinen o complementen, algo que parece impensable con la pintura.
  • Además de esto, el papel pintado utiliza texturas, dibujos y patrones que cuesta mucho replicar con las paredes pintadas. Gracias a esto podremos crear decoraciones, ambientes y espacios diferenciados que ayudarán a crear zonas distancias personalizadas y únicas.
  •  No solo eso, sino que el papel pintado también cuenta con la ventaja de que permite una combinación con revestimientos, pinturas, frisos y otro tipo de piedras o maderas naturales, así que es muy fácil de combinar.
  • Para terminar, la última ventaja es que el papel pintado nos ayuda a conservar la pared y, además, puede cambiarse con facilidad. Los papeles de papel pintado son una excelente forma de darle un cambio a una estancia de manera temporal o permanente.